ELVIRA CONCHEIRO, Directora General del CEMOS, nos cuenta sobre las aportaciones de Valentín Campa en la vida del
COMUNISMO MEXICANO
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Me da mucho gusto tener la oportunidad de conversar con Elvira Concheiro (quien fuera militante del Partido Comunista Mexicano)sobre Valentín Campa Salazar.
Eric Suzán -
Pero a partir de los años 40 hubo un cambio muy importante en el Partido Comunista después del Cardenismo, que hace que esa organización quede en manos de un grupo muy limitado, un grupo muy sectario; muy “stalinista” (son los años de afianzamiento de la fuerza de José Stalin en Rusia y su intervención en todos los partidos comunistas). Y en el caso del mexicano, intervino acusando a su vieja dirección (o a su anterior dirección) con dos cuadros.
Laborde y Valentín Campa. Valentín siempre pensó que era por el asunto de que se había negado a asesinar a Trotski (así se las gastaba Stalin y es muy probable), pero el caso es que ellos quedan fuera…fue un líder de masas… esa capacidad, ese carisma, esa manera de hablar a las grandes masas.
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Elvira Concheiro: El rol que desempeñaba Valentín Campa -en su calidad de líder sindical al interior del Partido Comunista Mexicano- ¿cuál era?.
Eric Suzán -
Mira: El tema es muy importante porque el Partido Comunista se pensó -a sí mismo- como una organización de los trabajadores y para los trabajadores. Pero resulta que en este país los trabajadores estaban en otro lado: capturados, perseguidos o dentro de la estructura del Estado con los sindicatos oficiales (“el charrismo”); toda esta estructura que sabemos que tenía a los trabajadores (que tiene a los trabajadores en realidad, todavía). Por eso, una figura como Valentín Campa -como líder sindical- parte de un gran movimiento que fue el Movimiento Ferrocarrilero; pero después un activista; un hombre con mucha definición; mucha determinación, en lo que tenía que ser el trabajo de los militantes comunistas dentro de la clase obrera o en el seno de sus movimientos. Esto fue una cosa fundamental..
Daba mucho sentido a la actividad del Partido Comunista y mucho orgullo tener un personaje como Valentín en nuestras filas de una manera tan entregada, tan definitiva. Para eso vivía Valentín Campa; de manera que aprendíamos mucho los que no éramos obreros o trabajadores: aprendimos a saber de qué se trataba esa lucha, qué dificultades, qué sentido tenía esto de la conciencia de los trabajadores… Creo que fue un papel muy importante -muy relevante- y, además, acompañó a la dirección del Partido Comunista -siempre- en sus tareas generales. Primero en esta idea de un trabajo por superar dogmatismos; superar cerrazones que lo mantuvieron a él fuera del Partido Comunista durante 20 años. No fue poco, pero él siempre se sintió comunista: muy cercano a ese partido; peleando por regresar a ese partido y cuando hubo el cambio al principio de los años 60 (con Arnoldo Martínez Verdugo), Valentín pudo regresar al Partido Comunista y siempre hizo una dupla muy importante; muy cercana, con Martínez Verdugo en todos los cambios que vinieron durante los siguientes años.
Elvira Concheiro -
Con el paso de las décadas, Valentín fue ganando todo un peso específico al interior del Partido Comunista y se convirtió (me imagino) en todo un referente desde el punto de vista de los valores de la ética al interior del Partido Comunista…
Eric Suzán -
Totalmente, porque las acciones por controlar, por someter al movimiento de los trabajadores; a los sindicatos; a sus organizaciones, tuvieron muchas vías, pero una muy importante fue la corrupción. Se corrompió a todos los líderes sindicales (o la gran mayoría); pero incluso hacia abajo también permeaban esas formas de control (a través de la compra de los liderazgos).
Que Valentín fuera una persona incorruptible; que fuera una persona que pagó su firmeza y su honestidad; su convicción, con tantos años de cárcel no hacía más que (con el tiempo) crecer esa figura; hacer crecer esa figura. En el medio de los trabajadores tenía un gran respeto, pero entre los militantes comunistas pues todavía lo valorábamos más porque sabíamos lo que estaba costando en su persona -en su vida misma- esta congruencia y esta honestidad. Así que Valentín fue (sin duda alguna) un referente ético y un referente del ideal que teníamos los comunistas sobre lo que tenía que ser el comunista, en primer lugar, y el dirigente sindical.
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Oye Elvira: Y tú que lo conociste cuando eras muy pequeña (más allá del personaje político, del líder), en la parte humana ¿qué recuerdas que te haya llamado la atención de Valentín Campa?
Eric Suzán -
¡Muchas cosas! Tengo muchos recuerdos de él cuando era muy pequeña porque era un personaje tan cercano, tan cariñoso, una persona que sabíamos que salía de la cárcel y volvía a entrar. Yo recuerdo (particularmente la última vez que salió de la cárcel -de esa larga prisión de más de 10 años-): ¡qué cercanía! ¡qué afable era Valentín!
Un día se me ocurrió preguntarle que yo no entendía qué era eso de la plusvalía y me dijo: “Trae un lápiz y un papel. Yo te lo explico” y no se me ha olvidado. Era una persona muy cariñosa y muy amable; extremadamente sencillo, de manera que lo sentí -siempre- parte de mi familia.
Elvira Concheiro -
Nos compartía Eréndira Sandoval (cuando fuimos a la exposición fotográfica en el AGN -con motivo de la develación de la placa, hace unas semanas); nos decía: “Mira: aquí (en esa fotografía) está platicando con el celador” y veo el rostro de Valentín; cómo era un hombre que exudaba amor; exudaba un carácter afable, cariñoso con la otra persona ¡con qué rostro le está platicando!…”
Eric Suzán -
Al mismo tiempo parecía un hombre muy firme; muy rudo (porque sabía discutir políticamente fuerte), pero no personalmente: era una persona muy sencilla y muy muy amable.
Elvira Concheiro